Actualmente estamos en una recesión económica y desafortunadamente lo más seguro es que afecte a la situación financiera de nuestros clientes. Pero, ¿tiene consecuencias en nuestra filosofía de trabajo como diseñadores? Como sociedad, ¿cómo nos adaptamos a las nuevas circunstancias?

Cuando las inversiones y el sector inmobiliario se hunden, ¿hay oportunidad para la creatividad y la innovación?

Como diseñadores, tenemos que conseguir que la limitación económica agudice el ingenio y que el estancamiento no sea renuncia a la investigación. El diseño es capaz de introducir frescura y novedad, y en momentos difíciles se tiende a encontrar soluciones  creativas para beneficiarse de la situación. Durante la Gran Depresión se invirtió en el diseño: en EE.UU. las empresas empezaron a hacer sus productos más estéticamente atractivos para incrementar las ventas, y en Europa el enfoque cambió a diseñar productos más funcionales y eficientes.

Como sociedad, tenemos que asumir que las crisis son para los valientes; si el momento no es bueno, es necesario invertir, porque el que se para está perdido. Los arquitectos deben usar esta oportunidad para concentrarse en el papel como intelectuales públicos, redefiniendo el significado cultural de la arquitectura en la sociedad y creando una visión futura de la sociedad concibiendo un nuevo balance entre los intereses de la gente, los intereses económicos y los valores culturales y ecológicos.

La escasez actúa como un catalizador para la creatividad y la innovación. El diseño es creativo cuando rompe moldes y desarrolla soluciones innovadoras e imaginativas. Crear es descubrir maneras nuevas de desarrollar una idea, resolver un problema o enfocar una situación. La innovación se da cuando, a través del enfoque creativo, logramos resultados originales, aplicables y medibles. En tiempos de crisis, sobretodo, los resultados tienen que ser funcionales, tienen que producirse en una manera eficiente, tienen que tener un impago ecológico negativo en el medio ambiente, y tienen que ser asequibles para el grupo de gente a la que está enfocado.

El reto consiste en crear una nueva sociedad creativa, con capacidad de transformar la ciudad y generar nuevas oportunidades, como factor clave del desarrollo personal y social, así como del bienestar de los individuos y la sociedad.

Dado los últimos avances en la tecnología, estudiaremos en la próxima entrega dos propuestas que abarcan todos estos principios: La Arquitectura Sostenible y los Sistemas Modulares en la construcción.

Contenido validado por María Luisa De La Rubia
Socia Fundadora en Reformadisimo