Con la llegada del verano y las altas temperaturas los sistemas de refrigeración se convierten en la mejor alternativa para combatir el calor. Para ello, el aire acondicionado es la opción más recurrente. Sin embargo, existen otras alternativas de refrigeración más ecológicas y eficientes que no podemos pasar por alto. A continuación, vamos a desglosar los diferentes tipos de sistemas de refrigeración y sus beneficios para el hogar. En Reformadisimo somos expertos en refrigeración de viviendas, cuenta con nosotros como expertos en Reformas en Madrid.
Sistemas de refrigeración convencionales
Antes de entrar en materia de manera profunda vamos a repasar los sistemas de refrigeración para viviendas conocidos por todos. Estos son los 5 sistemas de refrigeración que nos han ayudado a combatir las altas temperaturas a lo largo de los años:
1.- Aire acondicionado fijo
Este es uno de los sistemas más utilizados para enfriar la temperatura de las casas. Su trabajo consiste en refrescar el ambiente bajando la temperatura interior unos cuantos grados para mantenerla de manera estable. Los sistemas de aire acondicionado funcionan por medio de lo que se conoce como ciclo frigorífico. Es decir, un aparato de aire acondicionado fijo no enfría. Más bien extrae el calor del aire de la habitación por medio de un proceso cíclico. Durante ese proceso el gas refrigerante cambia de estado líquido a gaseoso y viceversa.
Los tipos más comunes de aire acondicionado utilizados en el hogar son:
- Sistema de refrigeración de ventana.
- Sistema de refrigeración dividido o sin conductos (split).
- Sistema de refrigeración centralizada.
2.- Aire acondicionado portátil
Estamos ante un sistema que es igual que el anterior solo que se puede trasladar de una estancia a otra en cuestión de minutos. El aire acondicionado portátil es muy práctico. No requiere de instalación previa y se coloca directamente en el suelo. Este pequeño sistema de refrigeración puede llegar a enfriar espacios de hasta 50m2. Su única desventaja con respecto a su hermano mayor es que es un poco más ruidoso que él a la hora de trabajar.
3.- Ventiladores
¿Quién no ha usado un ventilador para paliar los estragos del calor en verano? Los ventiladores son sistemas de refrigeración convencionales que ayudan a circular el aire caliente condensado en un espacio interior. Sus tipos son variados y asequibles. Podemos encontrar varias clases en el mercado de ventiladores según su tamaño y función:
- Ventilador de pie.
- Ventilador de suelo.
- Ventilador de mesa.
- Ventilador USB para escritorios.
- Ventilador de torre.
- Ventilador de techo.
- Ventilador de sobremesa.
4.- Nebulizadores
Este aparato consiste en un sistema de refrigeración para el hogar cuya principal función es pulverizar agua nebulizada. Es de instalación fija y se utiliza para refrescar el ambiente en zonas exteriores, como el jardín o la terraza.
5.- Enfriadores de aire
Son sistemas de refrigeración que también se conocen como climatizadores evaporativos. Su funcionamiento se lleva a cabo por evaporación. Un ventilador es el encargado de sacar el aire caliente de la habitación a través de un filtro tapado por agua helada. Su uso puede llegar a bajar la temperatura ambiente hasta 16 Cº respecto a la temperatura del exterior. Debido a que necesita captar aire nuevo para poder funcionar, su instalación ha de realizarse junto a una ventana. Este sistema tiene un consumo realmente bajo.
Sistemas de refrigeración ecológicos y eficientes
En nuestro país el 25% del consumo de las viviendas está relacionado con la electricidad. De hecho, esta energía ocupa el primer lugar del consumo total con un 35,1% con respecto a otras fuentes de energía usadas en el hogar. Las personas damos multitud de usos a la electricidad, pero uno de ellos destaca. Esta es la energía que más utilizamos para refrigerar nuestra casa con un uso del 99.70%. Sin embargo, tan solo el 0.30% de los aparatos de aire acondicionado en España son renovables. Estas cifras han creado la necesidad de buscar otros sistemas de refrigeración igual de eficientes, pero más ecológicos. Sin uso de compresores ni refrigerantes químicos.
Hoy día, ya se pueden instalar en los hogares estos sistemas de ventilación respetuosos con el medio ambiente y con la economía de tu bolsillo:
1.- Ventilación mecánica o inteligente
Dentro de esta modalidad nos encontramos con dos tipos de refrigeración. La ventilación mecánica controlada de simple flujo y la ventilación mecánica controlada de doble flujo. La primera funciona por medio de una central de ventilación instalada en la casa. La mima introduce aire nuevo directamente desde el exterior para conseguir un desequilibrio de temperatura en la estancia. El segundo, por su parte, extrae el aire de la habitación para renovarlo e impulsa el aire nuevo a una temperatura cercana a la presente en el interior. Esto permite un importante ahorro de energía.
¿Cómo se produce este proceso? Gracias al recuperador de calor compuesto por un ventilador extractor de aire y un ventilador impulsor de aire. A ambos se une un intercambiador de calor. De esta manera, el aire que se extrae y el que se impulsa se cruzan sin mezclarse e intercambiando sus temperaturas. Este es un sistema ecológico, renovable y perfecto para la salud de las personas alérgicas.
2.- Sistema aerotérmico de ventilación
La aerotermia es una tecnología limpia que logra extraer hasta un 77% de la energía del aire sin coste alguno. Su funcionamiento se produce a través de bombas de calor de última generación que se encargan de enfriar en verano y calentar en invierno. Es decir, se puede afirmar que la aerotermia aporta más energía de la que consume, ya que solo se paga su consumo eléctrico. La energía que extrae del aire es gratuita.
El sistema aerotérmico de ventilación es uno de los métodos más eficientes para lograr una temperatura agradable dentro del hogar todo el año. Este sistema de refrigeración extrae el aire del exterior y lo ajusta para su uso dentro de la casa. Estos equipos son perfectos para su instalación en viviendas unifamiliares, en casas de tamaño medio e incluso en edificios inteligentes. Instalación de calefacción por aerotermia.
3.- Aire acondicionado solar
Este tipo de aire acondicionado ecológico funciona igual que su homónimo, solo que obtiene la energía del sol. Para ello, utiliza unos paneles fotovoltaicos que absorben los rayos solares. Y estos pasan a alimentar el sistema de aire acondicionado. Si hablamos del aire acondicionado solar podemos establecer dos modalidades:
El aire acondicionado solar híbrido (aero-fotovoltaico)
Este sistema climatiza la vivienda por medio de una corriente de aire que refresca el panel de su interior. Al mismo tiempo, esta corriente captura el calor que está presente en el interior de la placa, que es finalmente impulsado hacia el interior de la casa. No sin antes pasar por unos filtros de partículas que aseguran su ausencia de polvo, ácaros y otros alérgenos. La temperatura de este aire se regula por medio de un dispositivo que combina parte de este aire con el aire interior de la vivienda.
El aire acondicionado solar por absorción
Por el contrario, este aire acondicionado solar contiene un fluido que se comporta con refrigerante. Este sistema de refrigeración funciona por medio de fenómenos físicos básicos. Por ejemplo, cuando un líquido se evapora absorbe calor y cuando se condensa entrega calor. El resultado es un sistema de mayor eficiencia energética y menor consumo eléctrico.
4.- Refrigeración evaporativa
Este no es un método nuevo para refrigerar el aire. De hecho, se trata de un sistema que se ha venido utilizando hace siglos. El enfriamiento evaporativo es una alternativa sostenible que se produce por medio de un proceso natural que usa el agua como refrigerante. Los condensadores y las torres de enfriamiento liberan al exterior el calor extraído al fluido por medio de la evaporación del agua. El agua en circulación entra en contacto con una pequeña corriente de aire que produce dicha evaporación. De esta manera, gran parte del calor se transfiere al aire, el cual se libera a la atmósfera más caliente y saturado. Un dato interesante relacionado con este sistema de refrigeración es que puede llegar a ahorrar hasta un 95% en el consumo de agua. Sin duda, una alternativa interesante y ecológica bastante rentable.
5.- Refrigeración bioclimática
Estamos ante un sistema de refrigeración basado en la arquitectura bioclimática. O lo que es lo mismo, en las conocidas como casas pasivas. Viviendas inteligentes capaces de mantenerse frescas en verano y calientes en invierno sin apenas recurrir a sistemas de climatización. ¿Cómo?
- Estudio geobiológico que asegure la calidad del terreno, así como un menor impacto sobre él.
- Eligiendo una buena orientación y adaptación a las condiciones del lugar.
- Ubicando los grandes huecos como ventanas y balcones hacia el Sur y los pequeños hacia el norte.
- Utilizando masas térmicas en la casa como, por ejemplo, muros de ladrillo o plaquetas.
- Por medio del uso de energías renovables que acompañen a las ventajas de la vivienda bioclimática.
Este uso pasivo de la energía se traduce en un gasto menor de energía activa y, por lo tanto, en una factura de electricidad más reducida.
Consejos para elegir un buen sistema de refrigeración
Un hogar medio español viene a gastar unos 990€ al año en energía según datos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía del Ministerio para la Transición Ecológica (IDAE). Teniendo en cuenta esta cifra se nos viene a la mente una pregunta ¿es tu sistema de refrigeración el adecuado para tu familia? Para hallar la respuesta correcta es importante tener en cuenta varios factores como la climatología del entorno, la hermeticidad y aislamiento de la vivienda, el número de estancias, etc.
Estas son algunas recomendaciones para acertar en la elección de un buen sistema de refrigeración para el hogar:
Opta por sistemas integrales
Son soluciones integrales que te brindan un sistema de calefacción y refrigeración en uno. De esta forma, se consigue el máximo confort con la mínima inversión y obra. Busca un sistema que sea además de flexible, eficiente y respetuoso con el medio ambiente. A medio – largo plazo verás el ahorro en tu factura de la luz.
Apuesta por el bajo consumo
Los conocidos como emisores de baja temperatura son sistemas que ofrecen un alto rendimiento utilizando poca cantidad de energía y proporcionando un control exacto de la temperatura por medio de radiadores de frío – calor, emisores empotrados, etc.
Incorporar sistemas de regulación y control
Para acertar con la elección de tu equipo de refrigeración es fundamental prestar atención a aquellos sistemas capaces de recoger información para interactuar con las instalaciones incluso a través de dispositivos móviles. Así, la temperatura del hogar puede ser controlada vía remota para un mejor aprovechamiento de la energía. Estos sistemas de regulación y control permiten la programación de los equipos, así como la monitorización de sus consumo.
No te olvides de la ventilación
La renovación del aire interior de una vivienda es también importante de cara a mantener un ambiente saludable, libre de contaminación y alérgenos. Para ello, existen sistemas de ventilación descentralizada de bajo demanda capaces de garantizar una renovación del aire inteligente y sostenible.
Recurre al asesoramiento profesional
A veces, viene muy bien preguntar a familia y a amigos sobre la rentabilidad de sus sistemas de refrigeración. No obstante, no debes olvidar que cada casa y familia son diferentes. Por lo tanto, tienen unas necesidades que puede que no tengan nada que ver con las tuyas. Por este motivo, lo más recomendable es acudir al asesoramiento profesional de expertos en el sector. En Reformadísimo realizamos un estudio sobre la demanda frigorífica de tu vivienda en función de sus características constructivas. Así logramos elegir los equipos que mejor se ajusten en tamaño y funciones a las necesidades de cada usuario. Entra en nuestra página web y pídenos información sin compromiso.
En definitiva, hoy día no solo debemos preocuparnos por mejorar el confort dentro de nuestra casa en cuanto a temperatura se refiere. También es importante saber elegir qué tipo de sistema de refrigeración se ajusta mejor a nosotros, así como a las características de nuestra vivienda. Y todo ello, sin olvidarnos de cuidar el medio ambiente, con el fin de reducir el impacto ecológico al tiempo que pagamos menos en electricidad.
Muchos de los que ya han esto esta inversión ya han podido comprobar la rentabilidad de la misma. ¡Adelante! Es hora de dar el paso.
CONTENIDO VALIDADO POR MARÍA LUISA DE LA RUBIA
Socia Fundadora en Reformadisimo