Reforma Integral de casas con más de 200 metros cuadrados

Coste de una reforma integral en 2025

En 2025, reformar integralmente una vivienda de más de 200 m² en Madrid puede costar de 140.000 € a más de 200.000 €, según calidades y alcance de la obra.

El precio por metro cuadrado de una reforma integral en 2025 oscila en torno a 800 € – 1.000 € por m² para calidades medias. Si optas por acabados básicos y estándar, podrías bajar hacia los 600 € – 700 €/m², mientras que con materiales premium y diseño a medida el coste puede superar los 1.100 €/m². En viviendas grandes suele haber cierta economía de escala: algunos gastos fijos (proyecto, licencias, etc.) se reparten, así que el coste por m² puede resultar un poco menor que en pisos pequeños, aunque el desembolso total sea alto.

Para hacerte una idea, reformar por completo un chalet o piso de 200 m² suele suponer una inversión aproximada de 150.000 € a 180.000 € en calidades medias. Este rango puede ampliarse hacia abajo o arriba según tus elecciones: no es lo mismo instalar suelos laminados normales que un parquet de madera noble, o elegir sanitarios estándar frente a equipamiento de lujo. Cada decisión de diseño y materiales influye en el presupuesto.

También es importante considerar costes añadidos que a veces se pasan por alto: los honorarios del arquitecto y aparejador (pueden suponer un 8-15% del presupuesto), la tasa de licencia de obra y el ICIO (Impuesto de Construcciones) del Ayuntamiento, posibles gastos de mudanza o alquiler temporal durante la obra, etc. Por ello, siempre recomendamos dejar un margen del 10-15% para imprevistos en tu presupuesto. Si quieres más detalles sobre precios, puedes leer nuestro artículo específico ¿Cuánto cuesta una reforma integral de 100 m² en Madrid?, donde desglosamos costes por partidas y calidades.

Una reforma integral bien planificada no solo es un gasto, sino una inversión. Al modernizar completamente una vivienda grande, su valor de mercado puede incrementarse significativamente (se estima que entre un 10% y un 20% tras una buena reforma). Además, podrás ahorrar en consumos a largo plazo si mejoras el aislamiento y las instalaciones (menos gasto en calefacción, agua, luz…). Eso sí, conviene analizar la rentabilidad: en casas muy antiguas, invertir en eficiencia energética puede dar derecho a subvenciones o deducciones fiscales, algo que veremos más adelante.

En resumen, el coste de reformar una casa grande dependerá en gran medida de tus prioridades (calidad vs. presupuesto) y de las características de la vivienda. Lo recomendable es solicitar un presupuesto personalizado a empresas especializadas, donde detallen cada partida. Así sabrás exactamente cuánto supondrá la obra y podrás ajustar el proyecto a tu presupuesto disponible. En Reformadísimo elaboramos presupuestos claros y cerrados, evitando sorpresas durante la ejecución.

Tendencias en domótica y hogar inteligente

La domótica se ha vuelto protagonista en las reformas integrales de 2025: las casas grandes incorporan cada vez más sistemas inteligentes para mejorar comodidad, eficiencia y seguridad.

En una vivienda de más de 200 m², la integración de tecnología puede marcar una gran diferencia. ¿Qué es tendencia actualmente en hogares inteligentes? Por un lado, los sistemas de climatización inteligente (termostatos que aprenden tus hábitos y optimizan la calefacción y aire acondicionado por zonas). Por otro, la iluminación domótica: instalar luces LED regulables y controlables por voz o smartphone, que permiten crear ambientes y ahorrar energía ajustando la intensidad según la hora del día o presencia en la habitación.

Tampoco pueden faltar los asistentes de voz tipo Alexa o Google Home, integrados con electrodomésticos y persianas automáticas. Imagina poder decir “Buenas noches” y que automáticamente se apaguen todas las luces, se baje la temperatura y se active la alarma. Precisamente la seguridad es otro eje clave: las reformas actuales suelen incluir sistemas de alarma conectados, cámaras de vigilancia IP accesibles desde el móvil, videoporteros inteligentes e incluso cerraduras electrónicas sin llave física (acceso por huella dactilar o código).

Una novedad interesante en 2025 es la creciente adopción de soluciones domóticas inalámbricas, que facilitan la instalación en reformas (menos cables que pasar por las paredes). Por ejemplo, interruptores inteligentes y sensores por radiofrecuencia o WiFi que se pueden colocar sin obra pesada. Además, muchos propietarios apuestan por la gestión energética inteligente: paneles solares con baterías domésticas gestionadas por apps, cargadores para coche eléctrico integrados en la vivienda, o sistemas que monitorizan el consumo de cada electrodoméstico para optimizarlo.

En definitiva, una casa grande reformada hoy día suele transformarse en un “hogar inteligente”. Esto no solo aporta mayor comodidad (automatizando tareas cotidianas) sino que también puede traducirse en ahorros a largo plazo y en aumentar el valor de la vivienda. Nuestro consejo es prever la domótica desde la fase de proyecto: así se deja preparada la preinstalación necesaria (canalizaciones, espacio en cuadro eléctrico, etc.) y se integran los dispositivos de forma estética. Un buen diseño tecnológico hará tu casa más moderna y eficiente.

Normativa en Madrid: licencias y requisitos

Para reformar una casa de más de 200 m² en Madrid necesitarás licencia de obra mayor del Ayuntamiento, un proyecto técnico visado por arquitecto y cumplir la normativa urbanística vigente.

No podemos lanzarnos a hacer una gran reforma sin más: en la Comunidad de Madrid (y en toda España) las obras de envergadura requieren trámites administrativos. Lo primero es distinguir el tipo de obra. Una reforma integral que altera la distribución (derribo de muros, cambio de uso de estancias) o afecta a elementos estructurales se considera obra mayor. Por ello, deberás solicitar una licencia urbanística al Ayuntamiento antes de empezar. Un arquitecto colegiado tiene que redactar un proyecto técnico detallando la reforma (planos del estado actual y reformado, memoria de materiales, cálculos si hay refuerzos, etc.). Este proyecto se presenta en el Ayuntamiento para obtener la licencia.

En Madrid, la licencia de obra mayor puede tardar varias semanas o incluso meses en tramitarse, así que es importante contemplar ese tiempo en tu planificación. Además, conlleva unas tasas municipales y el pago del impuesto ICIO (aproximadamente un 4% del presupuesto de ejecución material de la obra). ¿Y si tu reforma no toca estructura y es principalmente interior? En algunos casos podría tramitarse mediante declaración responsable (un proceso más rápido), pero para viviendas tan grandes generalmente hay varios gremios implicados y es recomendable la licencia tradicional.

No olvidemos la normativa técnica: cualquier reforma debe respetar el Código Técnico de la Edificación (CTE) en temas de seguridad estructural, aislamiento térmico y acústico, instalaciones eléctricas, fontanería, accesibilidad, etc. Por ejemplo, si vas a actualizar la instalación eléctrica en una casa antigua, deberá adaptarse al reglamento actual (mayor número de circuitos, elementos de protección, etc.). O si reformas los baños, es oportuno instalar dispositivos de ahorro de agua (grifos y cisternas eficientes) ya que la normativa lo fomenta y podría ser obligatorio en nuevas edificaciones.

Otra normativa local a considerar en Madrid son las ordenanzas de protección de elementos comunes si tu vivienda está en un edificio comunitario. Deberás avisar a la comunidad de vecinos y gestionar correctamente la colocación de contenedores de escombros en la vía pública (pidiendo permiso si es necesario). Asimismo, hay normativas sobre horarios de obra para no molestar: los trabajos ruidosos suelen permitirse solo en ciertas franjas diurnas.

Por último, ¡una buena noticia! Existen ayudas oficiales para ciertas reformas: según la web oficial de la Comunidad de Madrid, hay subvenciones vigentes para proyectos que mejoren la eficiencia energética, accesibilidad o conservación de la vivienda. Esto significa que si en tu reforma integral vas a aislar térmicamente la casa, cambiar ventanas por unas de alto rendimiento, instalar paneles solares o poner un ascensor doméstico, podrías optar a una subvención que cubra parte del coste. Conviene informarse de los programas actuales (por ejemplo, las ayudas financiadas con fondos europeos Next Generation) y, en su caso, presentar la solicitud en plazo.

En resumen, antes de picar el primer azulejo debes tener en regla la documentación: proyecto técnico, licencia de obra y, si aplica, pedir ayudas económicas. Una empresa experimentada como Reformadísimo te asesorará y podrá encargarse de estos trámites burocráticos, para que tu reforma cumpla todas las leyes y normativas sin contratiempos. Nosotros nos ocupamos de gestionar licencias y permisos, asegurándonos de que tu proyecto se ajuste a la normativa madrileña.

Claves de diseño interior en casas de 200 m²

Las viviendas de gran tamaño ofrecen muchas posibilidades de diseño: desde espacios abiertos y luminosos hasta rincones personalizados. La clave está en lograr un equilibrio entre amplitud y confort.

Una de las primeras decisiones de diseño en una casa grande es la distribución del espacio. Muchas viviendas antiguas de gran metraje tienen planta compartimentada con numerosas habitaciones y pasillos largos. Una reforma integral es la ocasión ideal para tirar tabiques y unificar ambientes, especialmente en la planta baja o zona de día. Tendencias actuales apuntan a crear un espacio abierto tipo open concept: integrar salón, comedor y cocina en una sola área amplia, ganando luz natural y comunicación entre espacios. En casas de 200 m², eliminar paredes innecesarias puede hacer que el hogar se sienta aún más enorme y espectacular, como se aprecia en muchos proyectos de Reformadísimo.

Ahora bien, amplitud no significa vacío. Es importante delimitar zonas dentro de esos espacios abiertos para mantener la funcionalidad. Se pueden utilizar elementos separadores ligeros como cristaleras, paneles decorativos o cambios de pavimento para definir, por ejemplo, la cocina respecto del salón sin perder la visión conjunta. Otra clave es aprovechar la altura: si la casa tiene techos altos, ¿por qué no incorporar altillos, dobles alturas o lucernarios? Las viviendas grandes permiten jugar con la verticalidad, añadiendo carácter (vigas vistas, lámparas colgantes llamativas, etc.) y facilitando la entrada de luz desde arriba.

Hablando de luz natural, es fundamental potenciarla. En una reforma integral podemos agrandar ventanas o incluso abrir nuevos vanos (si la estructura lo permite) para bañar de luz los rincones más oscuros. También se suelen instalar ventanales panorámicos o correderas de cristal hacia terrazas y jardines, integrando el exterior con el interior, algo muy apreciado en chalets y áticos dúplex de gran tamaño. Una casa de 200+ m² a menudo cuenta con terraza, porche o jardín: conectar visualmente esas zonas exteriores con el interior mediante grandes puertas acristaladas aporta profundidad y luminosidad al salón.

En cuanto al estilo decorativo, las casas grandes admiten propuestas valientes. Muchos clientes optan por un diseño contemporáneo-minimalista para acentuar la sensación de espacio (colores claros, líneas sencillas, mobiliario de gran formato pero poco recargado). Otros prefieren darle personalidad a cada zona: por ejemplo, un home office con muebles vintage dentro de la planta abierta, o un rincón de lectura con una biblioteca a medida bajo la escalera. Precisamente, el mobiliario a medida es un gran aliado: armarios empotrados, estanterías de pared a pared, muebles multimedia integrados… en viviendas grandes permiten aprovechar huecos y mantener el orden sin saturar las estancias.

No podemos olvidar las habitaciones privadas: en 200 m² suele haber varias habitaciones y baños. Aquí la clave de diseño es crear suites cómodas. Por ejemplo, destinar un dormitorio principal con vestidor y baño en suite amplio (¡el lujo de tener un baño tipo spa con ducha y bañera separadas si el espacio lo permite!). También es útil pensar en futuros usos: si la familia crece o cambia, contar con una sala multiusos (sala de juegos, gimnasio, cuarto de invitados) aporta valor añadido. En definitiva, el diseño interior de una casa grande debe planificarse pensando en las personas que la habitan, adaptando cada metro cuadrado a su estilo de vida.

En resumen, las claves de diseño interior para viviendas de más de 200 m² pasan por aprovechar la amplitud creando espacios conectados y luminosos, sin sacrificar calidez. Un buen proyecto de interiorismo estudiará la mejor distribución (abierta o con divisiones estratégicas), potenciará la luz natural, escogerá materiales coherentes en toda la casa y definirá detalles que marquen la diferencia (iluminación indirecta, elementos decorativos a escala del espacio, etc.). Con asesoramiento profesional, tu casa grande puede convertirse en un hogar de revista, hecho a tu medida.

Fases de un proyecto de reforma integral

Una reforma integral exitosa pasa por varias fases clave: planificación, proyecto técnico, trámites, obra y acabados. Cada etapa es crucial para el resultado final.

A continuación desglosamos las etapas típicas de un proyecto de reforma integral en una vivienda grande:

1. Planificación inicial y diseño

Todo comienza definiendo qué se quiere lograr. En esta fase inicial, se hace una toma de requerimientos: necesidades de la familia, problemas actuales de la casa (espacios desaprovechados, instalaciones antiguas), estilo deseado, presupuesto estimado, etc. Con esa información, se suele elaborar un anteproyecto o propuesta inicial de distribución y diseño. Es el momento de soñar, pero también de ajustar a la realidad. Un arquitecto o interiorista realizará planos preliminares y quizás renders 3D para visualizar cómo quedarán los espacios tras la reforma.

2. Proyecto técnico y licencias

Una vez definido el diseño y alcance de la reforma, se desarrolla el proyecto técnico detallado. Aquí el arquitecto crea planos constructivos, memorias, mediciones y todos los documentos necesarios para la obra. Con el proyecto en mano, se tramita la licencia de obras ante el Ayuntamiento. Esta fase puede llevar varias semanas. En paralelo, la empresa de reformas prepara el presupuesto final cerrado basado en el proyecto. Es importante firmar un contrato de obra donde quede claro el alcance, plazos, costos y garantías.

3. Demoliciones y obra gruesa

¡Manos a la obra! La primera etapa de la ejecución suele ser la demolición: derribo de tabiques, retirada de revestimientos viejos (azulejos, solados), desmontaje de instalaciones antiguas, etc. En una casa grande, esta fase puede tomar tiempo y generar muchos escombros (siempre con las medidas de seguridad adecuadas). Después se acometen los trabajos estructurales necesarios: abrir huecos nuevos, reforzar vigas o muros si se quitaron soportes, construir nuevas paredes de ladrillo o pladur según la nueva distribución. Es la “obra gruesa” que da forma al nuevo espacio.

4. Instalaciones y equipamientos

Con la estructura lista, se instalan las nuevas instalaciones. Fontanería: tuberías de agua fría/caliente, desagües nuevos (especialmente si se reubicaron cocina o baños, habrá que cambiar bajantes, etc.). Electricidad: nuevo cableado conforme a normativa, más enchufes y puntos de luz según la necesidad actual (¡en casas grandes nunca sobran enchufes!). Climatización: instalación de sistemas de calefacción (radiadores o suelo radiante) y aire acondicionado, posiblemente por zonas. También si se incluye domótica, aquí se dejan los cables de red, sensores o centralitas necesarios. Esta fase es crítica, ya que las instalaciones quedan “empotradas” en paredes y suelos.

5. Cerramientos, acabados y muebles

Llegan los acabados, que son los que finalmente ves y disfrutas. Primero se cierran los paramentos: enfoscar y alisar paredes, colocar falsos techos, nivelar suelos. Luego se instalan los revestimientos: azulejos en baños y cocina, suelos nuevos (porcelánicos, tarima, etc.), alicatados especiales si los hay. Seguidamente, carpinterías: se montan las ventanas nuevas (por ejemplo, unas de PVC con doble acristalamiento para aislar bien esa casa grande), se colocan puertas interiores y armarios empotrados. Después, pintura de todas las estancias con los colores elegidos. Finalmente, se instalan los sanitarios en baños, la cocina (mobiliario, encimera, electrodomésticos) y los últimos detalles decorativos. En esta fase la casa empieza a parecer habitable de nuevo. Una vez limpios los espacios, se puede proceder al amueblado y decoración final según el proyecto de interiorismo.

6. Inspección final y entrega

Antes de dar por concluida la reforma, se realiza una revisión exhaustiva de todos los trabajos junto con los jefes de obra y el cliente. Se comprueba que todo funcione correctamente (instalaciones, electrodomésticos, grifería sin fugas, iluminación, sistemas domóticos, etc.) y que los acabados estén en perfecto estado. Si se detecta algún detalle pendiente o desperfecto, la empresa lo subsana durante el periodo de remates. Finalmente, se hace la entrega de la obra: la casa totalmente renovada, lista para disfrutar. Se facilitan al cliente las garantías de los trabajos realizados y de los nuevos equipos instalados. ¡Momento de estrenar hogar!

Como ves, una reforma integral conlleva múltiples fases y la coordinación de muchos profesionales: arquitecto, interiorista, albañiles, electricistas, fontaneros, carpinteros, pintores… Por eso es vital contar con una dirección de obra experimentada. En Reformadísimo nos encargamos de planificar y supervisar cada etapa, manteniéndote informado del progreso. Así te aseguras de que tu proyecto avanza sin sobresaltos, cumpliendo el calendario previsto.

Errores comunes en reformas de gran envergadura

Incluso en casas grandes, hay errores típicos que conviene evitar: desde subestimar el presupuesto o la duración, hasta improvisar cambios en mitad de la obra.

A continuación enumeramos algunos de los errores comunes que hemos visto en proyectos de reforma integral (¡para que tú no caigas en ellos!):

• No definir bien el alcance desde el principio: A veces, entusiasmados, se empieza la obra sin tener claro todo lo que se quiere hacer. Esto produce cambios sobre la marcha (añadir reformar también el sótano, o ampliar más la cocina) que incrementan el coste y el plazo. Lo ideal es planificar el proyecto completo antes de iniciar, y si surge algo nuevo, valorarlo cuidadosamente en tiempo y dinero.
• Ahorrar en proyecto o dirección técnica: Pensar que uno se puede saltar al arquitecto para ahorrarse sus honorarios es un error. En reformas grandes, un proyecto profesional y una buena dirección de obra evitarán problemas mucho mayores (errores constructivos, incumplimientos de normativa, sobrecostes por mala planificación…). Es una inversión que merece la pena.
• Elegir materiales solo por estética sin mirar prestaciones: Por ejemplo, un suelo muy claro y pulido puede quedar precioso, pero si es poco resistente al uso, acabará rayado o manchado en una casa con mucho tránsito. O escoger una grifería bonita pero de baja calidad puede implicar fugas pronto. Siempre hay que buscar un equilibrio entre diseño y calidad en los materiales.
• No prever imprevistos en el presupuesto: En viviendas antiguas y grandes, casi siempre surgen sorpresas al derribar (tuberías muy deterioradas, muros en mal estado, instalaciones no documentadas). Si has agotado todo tu presupuesto al céntimo, cualquier imprevisto te dejará en apuros. Reserva ese 10-15% para contingencias.
• Intentar coordinar uno mismo a todos los gremios: Algunas personas piensan en contratar por separado albañiles, electricistas, carpinteros… y gestionarlo por su cuenta. En una obra grande esto es un quebradero de cabeza enorme: retrasos porque un gremio espera al otro, falta de responsabilidad clara, posibles sobrecostes. Contratar una empresa que se encargue de todo evita esta situación.
• No formalizar todo por escrito: Desde el presupuesto detallado, los plazos, hasta cambios acordados durante la obra. Todo debe quedar reflejado en documentos o correos, para que no haya confusiones. Una reforma integral es un proyecto complejo y la comunicación clara con la empresa es esencial.

En definitiva, muchos de estos errores se evitan contando con profesionales de confianza y con buena planificación. Aprender de la experiencia (propia o ajena) es importante. Por eso, en Reformadísimo siempre asesoramos a nuestros clientes para anticipar problemas: estudiamos la vivienda a fondo antes de comenzar (evitando improvisar luego), recomendamos calidades duraderas que encajen en el presupuesto, y mantenemos una comunicación transparente durante todo el proceso. ¡Que nada arruine la ilusión de estrenar tu casa reformada!

Beneficios de contratar una empresa experta

Confiar tu proyecto a profesionales especializados te garantiza tranquilidad y resultados de calidad: ellos se ocupan de todo, optimizando tiempo, presupuesto y acabados.

Abordar una reforma integral de más de 200 m² por cuenta propia sería un reto titánico. Veamos las principales ventajas de dejar tu reforma en manos de una empresa experta como Reformadísimo:

1. Proyecto integral y asesoramiento personalizado: Una buena empresa de reformas cuenta con arquitectos y diseñadores que desarrollarán un proyecto a medida de tus necesidades. Te propondrán ideas que quizás no habías imaginado, optimizando el espacio y estética. Además, asesorarán en la elección de materiales, distribuciones, domótica, etc., aprovechando su experiencia en proyectos similares.
2. Gestión completa de permisos y licencias: Olvídate del papeleo engorroso. Los profesionales tramitan por ti la licencia de obra, las subvenciones disponibles y cualquier permiso necesario. Esto asegura que la reforma cumpla todos los requisitos legales, evitando multas o parones por trámites mal gestionados.
3. Coordinación de gremios y plazos: Una empresa especializada se encarga de coordinar a todos los oficios (albañiles, fontaneros, electricistas, carpinteros, pintores…). Esto garantiza un trabajo en equipo eficiente, siguiendo un calendario preestablecido. Tu obra avanzará sin las típicas demoras de “hoy no vino el electricista” o “falta material”, porque hay una planificación profesional detrás.
4. Calidad garantizada y solución de imprevistos: Al tener experiencia en cientos de reformas, estas empresas saben cómo resolver los problemas que surjan sobre la marcha (y surgen, créenos). Cuentan con proveedores de confianza y estándares de calidad en cada partida. Además, ofrecen garantías por escrito sobre los trabajos realizados: si algo queda mal, lo arreglarán sin coste adicional.
5. Optimización del presupuesto: Puede sonar contradictorio (ya que obviamente hay que pagar sus servicios), pero una empresa experta a menudo ahorra dinero al cliente. ¿Por qué? Porque evitan errores costosos, aprovechan mejor los materiales, obtienen descuentos de proveedores por volumen y previenen sobrecostes. Todo está presupuestado y controlado, sin improvisaciones que disparen el gasto.
6. Seguridad y tranquilidad: Delegar la reforma en profesionales te quita un enorme estrés de encima. No tendrás que lidiar con cada detalle técnico, ni perseguir a trabajadores, ni preocuparte por si algo está bien hecho. Podrás seguir tu día a día con la confianza de que tu proyecto está en buenas manos, recibiendo informes periódicos del avance.

En Reformadísimo estamos orgullosos de ofrecer todos estos beneficios. Nuestro equipo ha llevado a cabo proyectos de reforma integral en viviendas de todos los tamaños, coordinando más de 1000 reformas con un alto nivel de satisfacción. Cuando contratas una empresa experta, inviertes en tu tranquilidad y en la calidad del resultado final. El objetivo es que, al terminar la obra, sientas que valió la pena cada euro invertido al ver tu casa transformada tal y como imaginabas (¡o incluso mejor!).

Casos de éxito: antes y después

Ver ejemplos reales ayuda a imaginar el potencial de tu reforma. Te compartimos 2 casos de viviendas grandes renovadas con éxito, para inspirarte con sus antes y después.

En Reformadísimo hemos tenido el placer de transformar por completo muchas casas amplias en Madrid. Aquí te presentamos dos casos de éxito emblemáticos:

Caso 1: Chalet de 250 m² en las afueras

Situación inicial: Un chalet de tres plantas construido en los años 80, con estética anticuada y espacios desaprovechados. Tenía habitaciones muy pequeñas (los hijos adolescentes compartiendo un cuarto ajustado) y un sótano diáfano infrautilizado. Instalaciones originales de 40 años y aislamiento deficiente (frío en invierno). Los propietarios querían modernizarlo y adaptar la distribución a su familia.

Reforma realizada: Nuestro equipo reorganizó totalmente la planta de dormitorios, creando dos suites juveniles en el sótano para las hijas (con baño y vestidor propio cada una). Se amplió el salón en planta baja uniendo un cuarto contiguo, logrando un espacio salón-comedor-cocina abierto de 60 m². Instalamos un aislamiento térmico envolvente (fachada y cubiertas) y cambiamos todas las ventanas a modelos de PVC climalit, solucionando definitivamente los problemas de frío. En cuanto a diseño, optamos por un estilo moderno cálido: se colocó tarima flotante de roble en toda la casa, se abrió la cocina con una isla central y se revistió la chimenea del salón con piedra decorativa. Integración de domótica: luces LED regulables y termostatos inteligentes por planta. La obra duró 5 meses.

Resultado: El chalet pasó de viejo y compartimentado a un hogar contemporáneo y amplio. Las hijas ahora disponen de habitaciones cómodas y espaciosas, y la planta baja se ha convertido en el corazón de la casa, perfecto para reuniones familiares. Además, el gasto energético se redujo ~30% gracias al aislamiento y sistemas eficientes. Los propietarios quedaron encantados: “parece una casa nueva”, nos dijeron. Puedes ver fotografías del antes y después en nuestra galería de reformas.

Caso 2: Piso señorial de 210 m² en el centro de Madrid

Situación inicial: Piso antiguo en un edificio clásico del barrio Salamanca. Techos altos, 5 dormitorios y 3 baños, pero con distribución muy tradicional y pasillos largos. Los dueños (una pareja joven) querían actualizarlo para vivir cómodamente: menos habitaciones pero más grandes, cocina integrada y estética elegante respetando el carácter señorial. Los baños estaban obsoletos y había que renovar todas las instalaciones por seguridad.

Reforma realizada: Planteamos una redistribución importante: se redujeron los dormitorios de 5 a 3, destinando un cuarto a ampliar el salón y otro a crear un gran vestidor para el dormitorio principal. Se derribó la pared entre cocina y comedor para tener una cocina abierta con isla y comedor diario. Restauramos elementos con encanto (molduras originales en techos, puertas antiguas) combinándolos con acabados nuevos de lujo: se instaló suelo de madera maciza en espiga, se hicieron a medida estanterías de madera lacada en el salón y se montó iluminación LED perimetral indirecta en el hall. Baños totalmente renovados con mármol y equipamiento moderno. Se actualizaron las instalaciones eléctrica y de fontanería completas, añadiendo aire acondicionado por conductos camuflados. Duración: 4 meses de obra intensa.

Resultado: El piso mantiene su aire clásico pero ahora con la comodidad del siglo XXI. Los espacios fluyen – del recibidor se ve el salón y la cocina integrados llenos de luz – y cada estancia es amplia. El dormitorio principal tipo suite ganó un vestidor digno de revista y un baño espectacular. La pareja destaca que la reforma “hizo la vivienda mucho más funcional y luminosa sin perder su esencia”. Este proyecto incluso fue publicado en un blog de decoración por su combinación de elementos tradicionales y diseño contemporáneo. Sin duda, un ejemplo de cómo una reforma integral puede revalorizar una vivienda señorial en el centro.

Estos casos demuestran que, con un buen equipo, no hay casa grande imposible. Cada proyecto es único, pero todos comparten la satisfacción de ver un cambio radical a mejor. Si quieres más inspiración, te invitamos a explorar nuestros vídeos de reformas y testimonios de clientes satisfechos. ¡Tu casa grande podría ser el próximo caso de éxito!

En resumen

Abordar la reforma integral de una vivienda de más de 200 m² es un proyecto apasionante que, con la orientación adecuada, puede resultar mucho más sencillo de lo que parece al principio. Hemos visto cómo calcular los costes en 2025, las últimas tendencias en hacer tu casa más inteligente, los requisitos normativos que no puedes pasar por alto, los aspectos clave de diseño para sacar partido a cada rincón y los errores que debes evitar en el camino. Además, conoces ya las ventajas de confiar en profesionales expertos que te guíen en cada fase.

En Reformadísimo creemos que cada gran reforma es una oportunidad para mejorar la calidad de vida de nuestros clientes, creando hogares bellos, funcionales y eficientes. Si has llegado hasta aquí, seguramente estés lleno de ideas y motivación para emprender la transformación de tu vivienda. No dudes en dar el siguiente paso y pedirnos asesoramiento: estamos para ayudarte a hacer realidad esa casa ideal que tienes en mente, sin sobresaltos y con garantías.

Preguntas frecuentes