Reforma Integral
Como os hemos enseñado en otras ocasiones, partir de una buena distribución es primordial. A veces la vivienda ya la tiene de origen y otras veces como sucede en este caso, debemos buscar la más apropiada. En esta ocasión, se decidió redistribuir todos los espacios para crear dos zonas bien definidas, la zona de noche y la zona de día. En este caso contábamos con muchos compartimentos que provocaban muchos espacios desaprovechados.
La zona de día conectaba el salón con la cocina a través de una cerrajería negra de hierro y vidrio que crea un marcado contraste con la tarima laminada del suelo que presenta un suave tono avellanado. Esta serie de contrastes estará presente en toda la vivienda y se introducirá de forma constante en todas las estancias de la casa.
En la cocina predominan una paleta de colores en tonos oscuros (negros y marrones combinados con diferentes tipos de beiges).
La zona de noche está formada por tres dormitorios y dos baños. En el baño principal se cambia también el acceso para poder acceder desde la entrada. Priman los tonos neutros. El otro baño es en suite y pertenece a la habitación principal, la nota divertida nos la trae la elaborada colocación en espiga de los azulejos verduzcos en la zona de la ducha, combinados con toda la grifería y perfiles de la ducha negros que vuelven a contrastar con los colores claritos que tiene el resto del baño y de la habitación principal.
Las puertas son de madera maciza en color blanco a juego con la pintura de toda la casa.
En esta reforma se puede apreciar un constante juego de contrastes que visualmente rompe la continuidad de los colores neutros, que no dejan espacio alguno a la monotonía.
Reforma de una vivienda de 90 m2
Finalización de Obra: Enero 2022