Reforma Integral en Chamberí

Esta vez, el destino nos esperaba muy cerquita del metro iglesia entre Eloy Gonzalo y Santa Engracia. Aquí teníamos un piso dd 140 m2 con una característica planta rectangular de origen. Era muy alargado con un pasillo longitudinal que conducía a todas las estancias.

Nada más entrar nos recibe un amplio hall del que hemos mantenido la moldura y el falso techo antiguos con magníficos cuarterones que dotan al recibidor de un envolvente ambiente totalmente retro. 

Nos encontramos que desde el hall salen unas puertas correderas a cada lado, pero cada una con una personalidad totalmente marcada y diferente. Una está fabricada en carpintería de madera y vidrio, haciendo así una parrillera con cuadraditos, y la otra es de cerrajería de hierro en negro y vidrio. Las dos están enfrentadas de modo que dejen pasar la luz de una estancia a otra. La madera es la del salón y la de hierro es la de la cocina-comedor.

La cocina tiene una zona bastante amplia cuyo fin es usarse de comedor habitual.

Toda esa zona de hall, comedor y pasillo se ha decidido pintar con tono color verde citrino y, en la zona de la cocina se ha puesto papel pintado con diseños florales, la cocina tiene otro acceso al pasillo.

En uno de los aseos hemos alicatado hasta media altura, para después poner hasta el techo un colorido papel pintado en fuertes tonos fríos contrastado con cálidos pájaros. Este baño tiene una pequeña ducha.

En la habitación de invitados, hemos diseñado un baño en suite.

Aquí, podemos observar un alicatado de suelo a techo siguiendo la estela del resto de diseños anteriores. Nos encontramos un diseño floral con pájaros que imita papel existente en el resto de la casa, pero con la diferencia de que es porcelánico. Esta dotado de ducha y el mueble es laminado imitación madera.

La habitación en suite tiene a la entrada un cargado vestidor con dos frentes de armario uno a cada lado.

La habitación principal goza de otro baño en suite. Este es totalmente distinto, este alicatado hasta media altura con un alicatado en blanco y después se ha pintado en negro. En la ducha se ha puesto un azulejo en negro igual que la pintura. Grifos dorados estilo vintage culminan un baño con dotes de antiguo clasicismo del siglo pasado.

Las ventanas se han conservado excepto dos en la cocina, que se cambiaron por completo y la iluminación son focos empotrados, único toque moderno.

Las puertas lacadas en blanco, tienen diferentes diseños algunas son lisas y otras con marcados cuarterones.

Los frentes de armarios son laminados por fuera de color. Si nos asomamos vemos que por dentro tienen las baldas en melamina.

Esta reforma nos transporta a las antiguas casas del S.XIX por su aire vintage y su evocador encanto y para nosotros además es el orgullo de un trabajo impecable a tener presente.