En función de su interior, las viviendas pueden ser de muchos tipos: pisos, apartamentos, estudios, áticos, lofts, etc. Este último tipo de vivienda, a pesar de no ser de los más frecuentes, y el gran desconocido para muchos, ofrece numerosas ventajas con respecto a otros. Pero antes de analizar los beneficios de un loft, es necesario definir qué es y qué caracteriza a los hogares de este tipo.

Un loft es un espacio caracterizado por tener pocas divisiones interiores, así como grandes ventanales. En muchos casos, también tienen los techos altos. Sobre todo en algunas ciudades de Estados Unidos, puesto que los que se encuentran en edificios con cierta antigüedad suelen tener su origen en fábricas y estar decorados en estilo industrial.

Beneficios de un loft como vivienda

Hasta no hace mucho, lo más habitual era encontrar lofts en empresas pequeñas o en edificios de oficinas. Pero cada vez es más habitual encontrar uno habilitado como vivienda. Ya eran populares en Estados Unidos desde hace algunas décadas. Concretamente, desde la segunda mitad del siglo XX, cuando diversos colectivos aprovecharon pequeñas fábricas en desuso para establecerse. Poco a poco, esta tendencia fue traspasando fronteras, y ya gozan de gran aceptación en gran número de países. Todo por las ventajas que ofrecen a quienes necesitan una vivienda diáfana y no gustan de muros y divisiones.

Entre las ventajas de un loft como vivienda está la posibilidad de poder decidir y diseñar los distintos ambientes de la vivienda sin preocuparse de los muros. Además, dado que no hay prácticamente tabiques, cambiar la distribución de los espacios de un loft resulta mucho más sencillo que hacerlo en una vivienda convencional. Se puede destinar a dormitorio el espacio que antes era un lugar de trabajo, y viceversa.

Por otro lado, la presencia de grandes ventanales dará mayor y mejor iluminación natural al interior. No habrá prácticamente muros que detengan la luz, por lo que llegará a prácticamente toda la casa. Y se distribuirá por ella de manera uniforme.

Más amplio y mejor ventilado

Además, la ausencia de paredes dará más metros útiles a la vivienda. Aunque no parezca que un tabique ocupa mucho espacio, la suma de todos los que hay en el interior de una casa pueden restar varios metros a la casa. También hay que tener en cuenta que los espacios más amplios se aprovechan mejor. Normalmente, un loft ofrece una mayor sensación de amplitud, lo que puede resulta, además de agradable, bastante relajante.

El aire que se respira en el interior de un loft, además, es de mejor calidad. Siempre y cuando, claro está, que se ventile adecuadamente. Pero en general, al no existir barreras para la libre circulación del aire en su interior, al abrir las ventanas para dejar entrar aire del exterior, este se repartirá por todo el loft y se ventilará mejor. Otra de los beneficios de un loft cuando se usa como vivienda.

La limpieza de estos espacios también será más sencilla. En ellas, al no haber separaciones, se acumula menos polvo, y la amplitud da menos sensación de suciedad. Tampoco habrá problemas para utilizar dispositivos como una Roomba para limpiar, puesto que no encontrará tabiques a su paso. Sólo los muebles.

Los muebles no se tienen que adaptar a la vivienda

Al ahora de decorar una vivienda y elegir muebles, siempre hay que tener en cuenta las dichosas medidas. Es decir, tienes que conocer el espacio que tienes disponible en cada estancia para poder colocar los muebles necesarios en cada habitación. Es decir, si en el dormitorio sólo cabe una cama de matrimonio de 1,35, hay que conformarse. Meter en ella una de 1,50 o mayor es imposible.

Por el contrario, en un loft no hay problemas de medidas. Si quienes viven en ella quieren una cama de matrimonio de dos metros de ancho, no tendrán mayores impedimentos para poder instalarla en el loft. Cabrá perfectamente, sin límite de espacio. Sólo hay que elegir dónde colocarla, y los complementos que la acompañarán en la zona destinada a dormitorio.

Además, los muebles se pueden distribuir de manera que no limiten el espacio, ni dificulten los movimientos por la vivienda. Una casa con paredes y puertas puede ofrecer bastantes problemas para moverse por ella. Sobre todo a quienes tengan niños de corta edad. Y a las personas con problemas de movilidad.

Al no existir tabiques ni puertas, no habrá barreras para las sillas infantiles, ni tampoco para las de ruedas. Únicamente, claro está, en el acceso al baño, puesto que para fomentar la intimidad, estos espacios sí tendrán tabiques. Por lo tanto, habrá que cuidar que, si en el loft van a residir personas que tengan problemas para desplazarse, tanto la entrada de sus baños como los sanitarios y los muebles, estén adaptados.

Contenido validado por María Luisa De La Rubia
Socia Fundadora en Reformadisimo