El proyecto llave en mano, también conocido como contrato llave en mano, es aquel que se pacta con el contratista para que este se haga responsable de todos los trámites necesarios para la construcción de una obra. Estamos ante una modalidad de acuerdo en la que tú te podrías despreocupar de gran parte de las gestiones. A continuación, vamos a ampliar toda esta información para que sepas qué ventajas tiene este documento.

¿Qué es un proyecto llave en mano?

Seguro que no es la primera vez que escuchas hablar de un proyecto llave en mano, pero ¿realmente conoces en qué consiste? Como decíamos al principio de este artículo el proyecto llave en mano es un contrato en el que el contratista se encarga de todo lo referente al inicio, desarrollo y finalización de una obra. Esto significa que el responsable del proyecto ejercerá la función de arquitectura, ingeniería, construcción y administración. En otras palabras, tú encargas una obra o reforma y ya no tienes que preocuparte de nada más hasta la entrega de llaves.

Este tipo de contratos son realmente útiles para aquellas personas con poco tiempo o escasos conocimientos en el sector. De esta manera, no tienen que estar pendientes del proceso de la obra, porque el contratista es el que se encarga de todos los trámites desde el principio hasta el final de la misma. El proyecto llave en mano, por lo tanto, se realiza un precio integral y en un plazo de entrega previamente determinado.

Componentes de un modelo de contrato llave en mano

Un proyecto llave en mano incluye, por lo menos, cuatro elementos:

  1. El diseño de la planta: Este ha de ser ejecutado por el contratista sin olvidar que ciertos puntos del diseño ya están predefinidos en el contrato según tus indicaciones e ideas. A veces, la preparación de un diseño de planta constituye el objeto de un otro contrato previo al proyecto llave en mano. Sea como fuere, el diseño de la planta ha de incluir un boceto de lo más detallado.

  2. El componente tecnológico: Esto incluye toda la tecnología necesaria para llevar a cabo un cabo la obra o la reforma. Para ello, es necesario contar con las patentes, el know how, así como con toda la tecnología incorporada en el diseño del proyecto. No obstante, en algunos casos el contratista usa sus propios medios tecnológicos e incluso los de otros en virtud de sus propios acuerdos contractuales. Esto implica disponer de los derechos de propiedad intelectual de todos ellos conforme a lo solicitado por el cliente o, en su defecto, por el ingeniero de la obra.

  3. Los suministros, construcción y montaje: En todo modelo de contrato llave en mano deben aparecer también las obligaciones del contratista. Se supone que esta persona es responsable de toda la construcción y montaje de la misma lo cual significa que también es su obligación la contratación de unos subcontratistas determinados. Todo ello, deberá estar incluido en el contrato llave en mano para que usted pueda comprobar quiénes son estos profesionales e incluso negociar el precio de las subcontratas.

  4. Plazos: Es importante establecer un calendario detallado para la finalización del proyecto, que incluya fechas límite para cada fase del proceso, desde el diseño hasta la entrega final. Estos plazos deben ser realistas y tener en cuenta cualquier imprevisto que pueda surgir durante la ejecución del proyecto. Además, el contrato debe establecer las consecuencias en caso de incumplimiento de los plazos acordados, para garantizar que el proyecto se complete en el tiempo previsto y que todas las partes cumplan con sus obligaciones.

¿Cuáles son las responsabilidades del cliente en un proyecto llave en mano?

Ya hemos visto que el contratista es la persona que ha de encargarse de la totalidad del proyecto de reforma u obra. Esto no te exime como cliente de determinadas responsabilidades que no deberías olvidar:

  • Permitir al contratista el acceso al lugar de la construcción.

  • Facilitar la entrada a la obra a todos los equipos de trabajo.

  • Colaborar con el contratista en todo lo necesario para la obtención de permisos y licencias de obra exigidas.

  • Abonar el precio previamente pactado.

Y ya que hablamos de dinero ¿es rentable un proyecto llave en mano? El coste de un contrato de estas características supone el desembolso de una cantidad determinada de dinero. Si colocamos esta cuantía en una balanza observamos que el tiempo que el cliente ahorra, unido a la despreocupación por la obra, así como a la evitación de quebraderos de cabeza innecesarios, el resultado es una inversión de lo más rentable. Por ello, es momento de hablar de las ventajas que supone la contratación de un proyecto llave en mano.

Ventajas de los contratos llave en mano

Los principales beneficios que se desprenden de un proyecto llave en mano son los siguientes:

Precio cerrado

Una vez que firme el contrato tendrá un precio único y cerrado. Esto evitará la aparición de gastos extras con los que no contabas a lo largo del plazo de ejecución de la obra.

Plazos de entrega pactados

Lo mismo sucede con los plazos de ejecución de la obra. En un proyecto llave en mano el contratista te deberá plantear una serie de fases en las que se habrán de realizar los diferentes tipos de trabajos dentro de un calendario previamente establecido. De esta manera, siempre sabrás exactamente en qué fase se encuentra la obra, así como sus tiempos de ejecución.

Comunicación con una sola persona

¿Te imaginas tener que hablar con todos los integrantes de la obra cada vez que surja una duda o complicación? En los proyectos llave en mano solo tendrás comunicación con un responsable conocido como project manager. Este será el único profesional con el que tendrá comunicación directa para un mayor control de tu obra o reforma. Gracias a esto, ahorrarás tiempo y esfuerzo tratando de localizar a los diferentes responsables de cada fase del proyecto.

Ahorro de dinero

Lo que al principio parece un gasto importante de dinero, se traduce, como hemos visto, en la evitación de muchos problemas. De igual modo, la contratación de un proyecto llave en mano también supone la reducción de riesgos financieros. Es decir, la empresa constructora se hace responsable de todos los extravíos, daños y conflictos que se pueden producir a lo largo del proyecto sin que tengas que asumir ninguna desviación en el precio.

Ahorro de tiempo

Al optar por un servicio de llave en mano, puedes despreocuparte de los trámites y la coordinación entre diferentes los proveedores, ya que una única persona o empresa se encarga de todos los aspectos del proyecto, desde la planificación y diseño hasta la ejecución y entrega final. Esto permite ahorrar tiempo en la gestión, la comunicación, la negociación de precios, la supervisión de la obra y la resolución de posibles problemas, lo que se traduce en un proyecto terminado de manera más eficiente y en menor tiempo.

Consejos para efectuar un proyecto llave en mano

Ya que vas a depositar tu confianza plena en un equipo de trabajo que se va a encargar de la totalidad de tu obra, es importante que sepas qué pasos tienes que dar antes de tomar una decisión. Toma nota.

Cuanta más información mejor

Antes de empezar un proyecto llave en mano es fundamental reunirse con la empresa constructora para hablar. Cuanta más información tenga el contratista y sus trabajadores, mejor podrá trasladar sus ideas y necesidades del papel al ladrillo. No tengas miedo a reunirte con ellos cuantas más veces mejor. Ten en cuenta que esta es la mejor manera de que, empresas como la nuestra, te asesoremos para lograr un resultado perfecto. Verás como lo que en un principio todo parecían piezas de un puzle desordenadas empiezan a coger forma.

Elige bien la empresa constructora

Para que un proyecto llave en mano llegue a buen puerto es necesario que escojas una empresa que cuente con un equipo profesional multidisciplinar. ¿Qué significa esto? No olvides que un contrato llave en mano es aquel en el que tú no tendrás que hacer nada. Serán otras personas las que se encarguen de realizar todos los trámites necesarios para sacar el proyecto adelante. Por este motivo, tiene de optar por una empresa que cuente con profesionales de todos los sectores: arquitectos, abogados, ingenieros, interioristas, decoradores, albañiles, pintores, electricistas, etc.

Asesoramiento

Una empresa constructora confiable es aquella que no te dejará solo, especialmente en la primera fase del proyecto. Ellos son los que tienen que aconsejar en cuanto a materiales de construcción se refiere, mobiliario, elementos decorativos, etc. No te fíes de aquellas empresas que te prometen encargarse de todo, pero no te asesoran en nada ni tampoco dejan que las acompañes a visitar a sus proveedores. Recuerda que el proyecto es tuyo. De nadie más. Ten en cuenta esto, sobre todo a la hora de solicitar los permisos necesarios para comenzar la obra. En este caso, usted tendrá que dar el poder a la empresa para que pueda realizar todos estos trámites legales y administrativos por ti.

Todo por escrito

Jamás empieces a realizar una obra sin tener todos los papeles firmados. Asegúrate de que en el contrato que firmes están incluidas todas las cláusulas necesarias. No firmes nada con lo que no estés de acuerdo y pide tantas revisiones de contrato hagan falta antes de poner la firma final. Ten en cuenta, que lo firmado es lo que realmente cuenta a la hora de exigir responsabilidades.

Para que la calidad de tu obra esté siempre garantizada, cuenta para tus proyectos llave en mano con empresas con Reformadísimo. Somos especialistas en reformas totales o parciales y contamos con un amplio equipo de profesionales que se encargarán de todo para que tú puedas dedicarte a otras cosas. Ponte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso y elaboraremos para ti un presupuesto ajustado a tus necesidades.

Contenido validado por María Luisa De La Rubia
Socia Fundadora en Reformadisimo