A la hora de comprar una vivienda de segunda mano que requiera una reforma debemos tener en cuenta diferentes aspectos técnicos, legales, burocráticos y financieros, y seguir ciertos pasos que puedan garantizar conseguir materializar esa casa con la que tanto anhelamos.

Hay que medir y sopesar todos los factores, para así elegir bien.

Antes de adquirir una vivienda, cada vez es más común recurrir a la experiencia de un arquitecto para tener la certeza propia del asesoramiento especializado.

Hay aspectos arquitectónicos de la vivienda cuyo estado pasa habitualmente desapercibido para el comprador novato, como son las condiciones y el estado de elementos estructurales y constructivos (fachadas, tejados, cimentación, vigas y forjados), el estado de las instalaciones (tomas de agua, conexiones eléctricas, bajantes y desagües, conductos de calefacción, etc.), el estado del aislamiento térmico, y la viabilidad de mover tabiques o muros de carga para adaptar la vivienda a una distribución propia. Paralelo a estas investigaciones sobre las posibilidades de reforma, es esencial que se calcule el presupuesto con el cual se quiere trabajar para asegurarse que la reforma es posible.

Otro aspecto de importancia, antes de comprar una casa, es asegurarse en el Registro de la Propiedad de conocer su situación jurídica; es decir, si tiene una hipoteca pendiente o algún otro tipo de carga (deudas con la comunidad de propietarios, con el IBI, etc.). Al adquirir la propiedad, las cargas también se adquieren.

Una vez que ya tengamos la vivienda en propiedad, escriturada y registrada, podremos empezar con el proceso necesario para ejecutar la reforma:

  • El arquitecto elegido tendría que ir a la vivienda, tomar medidas para su levantamiento de planos del estado actual, y elaborar las propuestas de reforma.
  • Cuando ya se haya aceptado la propuesta definitiva, se procederá a la elaboración del proyecto de reforma que incluirá planos de arquitectura e interiorismo, planos de instalaciones y planos de detalles constructivos (si hiciesen falta), además de incluir las mediciones de ejecución material.
  • Se deberán conseguir los pertinentes permisos y licencias de obra del Ayuntamiento, así como el visado del proyecto por parte del Colegio de Arquitectos, para poder estar en la legalidad y evitar cualquier contratiempo o denuncia.

 

Aún en tiempos de crisis, adquirir una vivienda antigua por menos dinero e invertir en su reforma es una opción muy interesante, si sobretodo uno se deja guiar por los consejos de profesionales del sector. Además de que resulte más económica, esta opción permite que se acondicione la casa al gusto personal, mientras se mantiene su encanto original.

Contenido validado por María Luisa De La Rubia
Socia Fundadora en Reformadisimo