Reforma Integral en Ciudad Lineal

Esta nueva Reforma nos transporta a Ciudad Lineal, barrio muy conocido por nosotros y él cual comprende algunas de nuestras reformas más originales.

En esta ocasión no fue necesario realizar un cambio en la distribución y se respetó la distribución original de la vivienda, no obstante la reforma ha cumplido todos los objetivos marcados por nuestros clientes, contar con una una vivienda muy acogedora y cálida aprovechando todos los espacios al máximo. 

Para darle ese toque de calidez y candor del que hablamos antes, hicimos que la ventana de la cocina al salón fuese de madera de color blanco, para que le diese un toque más hogareño en lugar de las de hierro y cristal que dan un acabado más industrial

La cocina es rectangular con muebles en una pared y frontal, lacados en blanco con puertas plafonadas y encimera de formica color Nogal. Los tiradores son negros en contraste con los muebles y el grifo negro, también a juego. El fregadero de la cocina es porcelánico.

Azulejos de la cocina  que van a juego con la encimera en marrón brillante, a este tipo de azulejos se les llama manuales porque parece que están hechos a mano, y son como ladrillitos lo que le da un toque cálido y acogedor.

La puerta de la cocina la hicimos a juego en blanco con la ventana de madera para que quedase todo más homogéneo. Las puertas de toda la vivienda están decoradas con cuarterones.

El baño está alicatado hasta media altura con azulejos tipo metro, muy parecidos a los de la cocina pero en blanco, y el suelo es un porcelánico de 60×60 y rectificado.

Ubicamos en el baño, una zona de lavandería (quitamos la lavadora de la cocina y así administrar mejor el espacio). El mueble de baño es de color roble con 2 cajones y un lavabo sobre encimera blanco, grifería cromada y espejo recto.

La tarima elegida para el resto de la casa es AC4. Las ventanas de PVC en blanco, los radiadores de hierro los mantuvimos porque retienen mejor el calor y estéticamente son más bonitos.

En el dormitorio, hicimos de obra, unas hornacinas, encima del cabecero, muy decorativas y resultonas. Una de ellas con leds integrados para crear un bello efecto visual.

Toda esta combinación nos dio como resultado una vivienda tan acogedora como clásica.

Es el ejemplo perfecto de que los clásicos nunca mueren y siempre serán tendencia.