Reforma Integral en Barrio Manzanares

Esta Reforma Integral cuenta con una personalidad muy marcada, en donde la redistribución de la tabiquería es muy importante para conseguir unificar cocina y salón creando así un único espacio continuo junto a la terraza.  De esta forma conseguimos que la cocina tenga vistas al exterior.

Entre cocina y salón se dispone de un cerramiento acristalado de puertas abatibles plegables negras con cristales acanalados y translucidos que permite conectar los espacios y a su vez separarlos según las circunstancias del momento.  Los muebles de cocina son de un vistoso verde agua con una encimera blanca porcelánica para resaltar. Aparte al ser tan espaciosa, pudimos diseñar una espaciosa isla para el uso cotidiano.

Lo que en su origen era un baño y un aseo, con un simple movimiento de tabiques, conseguimos crear un amplio baño y otro baño en suite para el dormitorio principal.

Con el cambio de distribución otra zona a parte de la cocina que sale ganando es el dormitorio principal, puesto que lo reinventamos y aparte de un baño goza actualmente de un vestidor. Algo impensable con la distribución original.

Otro acierto fue el suelo, instalamos una tarima de auténtica madera, dura y bonita a partes iguales.

El alicatado de los baños es muy minimalista con piezas pequeñas de colores vivos

Se opto por seguir una estética blanca brillante, muy luminosa y colorista primando el azul en el baño en suite y el ocre con el negro en el otro baño.

Las puertas lacadas en blanco tienen un único plafón cuadrado.

Desde un principio está reforma os sorprenderá y enamorará por su sofisticación y carácter. Esta llena de pequeños toques y detalles que solos pueden pasar desapercibidos pero que en conjunto nos adentran en una vivienda acogedora y perfecta para soñar.

Y como no esto solo se podría dar en un entorno tan evocador como son los alrededores del rio manzanares.