Las reformas integrales de una casa no se limitan únicamente a su interior. Si se va a realizar una reforma completa de la vivienda, y ya tiene unos años, conviene también fijarse en algunos de sus elementos que dan al exterior. Por ejemplo, el tejado y la carpintería. Pero también las ventanas. No sólo por seguridad y para mejorar el aislamiento o la iluminación. Al cambiarlas puede variar todo el aspecto de la casa. No solo exterior, sino también la exterior. Instalar diferentes estilos de ventanas puede ser vital para que la casa de tus sueños tenga el aspecto que deseas.

Para ello sólo hay que elegir cuidadosamente el estilo de ventana que vas a instalar. Porque no todas quedan bien con todos los tipos de casa. Ni con sus distintas decoraciones y arquitecturas. Si no se elige el adecuado para el tipo de casa, o para la zona en la que se van a instalar, la ventana deslucirá todo el conjunto. Y el aspecto no será el esperado. Pero para conocer el estilo más adecuado, es necesario saber qué tipos de ventanas hay disponibles. Y también los criterios a seguir para seleccionar el más adecuado.

Estilos de ventanas: cómo elegir el más adecuado

Para la elección de ventanas hay que tener en cuenta diversas variables. Entre ellas, el estilo de la casa. También el que tendrán los interiores. Y el tipo de decoración que se va a emplear. Pero además, hay que considerar otros elementos ajenos a la vivienda. Aunque sí están relacionados con ella. Se trata fundamentalmente de su orientación y del clima del lugar en el que se levanta la construcción a reformar.

En caso de que esté orientada al sur, por ejemplo, y la zona no es muy cálida, opta por las ventanas de gran tamaño para aprovechar la luz del sol. Pero si la zona se caracteriza por contar con un clima cálido en verano, habrá que poner solución para que la luz no desemboque en un calor excesivo en el interior. Para remediarlo se pueden optar por las ventanas con contraventanas de madera, por ejemplo. Con ellas se puede cerrar parte de las ventanas cuando sea necesario evitar la entrada de calor.

En caso de que la vivienda esté orientada al norte, se debe optar por ventanas que cuenten con un gran nivel de aislamiento. También por modelos que tengan un tamaño inferior que los que se colocarían abiertos al sur. Es conveniente evitar también, que haya ventanas grandes apuntando hacia el oeste.

También hay que tener en cuenta las fachadas en las que se instalarán, y tener algunos conceptos claros al respecto. Por ejemplo, que en las medianeras de una casa no se pueden instalar. También que su aspecto y dimensiones no deberían romper con la estética de la fachada.

Por otro lado hay que contemplar, si se instalan ventanas en el techo, que suelen ser distintas a las de fachada. Y por descontado, elegir el tipo de apertura de ventana y los materiales con los que está confeccionada que más convenga. También te interesará leer este post sobre ventanas de PVC o aluminio.

Estilos de ventanas para casas rústicas: la madera manda

En las viviendas de estilo rústico, las ventanas con marco de madera son siempre las preferidas. También las que mejor quedan en relación a la vivienda. Eso sí, las hay de distintos tipos. Por ejemplo con marco exterior e interior de madera. En este caso todo, salvo el cristal, es de madera.

También se pueden instalar con distintos tipos de cristal. Por ejemplo, con vidrio templado. Este tipo de ventana es muy apreciada en casas unifamiliares de estilo rústico para una de sus estancias: el baño o el aseo. Ambas contarán, gracias a ellas, con luz natural de día. Pero desde fuera no se podrá ver el interior ni lo que sucede en ellas. Algo de agradecer, puesto que en el baño.

En caso de que las casas rústicas se encuentren en zonas de clima riguroso, hay que tener en cuenta que lo mejor es instalar tipos de ventanas con buen aislamiento. Generalmente, esto se consigue con las de climalit, pero esto no quiere decir que haya que renunciar a la madera. En la actualidad, las ventanas de climalit pueden imitar, en los marcos, todo tipo de materiales. Incluso la madera. De esta manera se podrá contar con un buen nivel de aislamiento pero sin renunciar a la madera.

Las ventanas de madera o de aspecto de madera no tienen tampoco por qué tener el mismo aspecto en sus marcos en el exterior y en el interior. Por ejemplo, en las localidades de estilo rústico o marinero que se caracterizan por sus paredes blancas y sus puertas y ventanas de colores. Es probable que en este caso las ventanas de la reforma tengan un tono vivo de cara al exterior. Pero para el interior se puede optar por otro más discreto, que cuadre más con la decoración.

Ventanas para el techo: en diagonal y con apertura distinta

Si la vivienda cuenta con una buhardilla o con un último piso con las paredes inclinadas porque se encuentra ya en las primeras etapas del tejado, las ventanas que se instalarán en este tipo de vivienda son ligeramente distintas a las convencionales. En primer lugar, porque están preparadas para su instalación en superficies inclinadas. Es lo habitual en un tejado, o en  una buhardilla que está en sus estribaciones y tiene sus paredes en diagonal.

Este tipo de ventanas, generalmente, se abren hacia afuera y no hacia los lados, como las que se colocan en las paredes rectas. Tampoco lo hacen hacia adentro, lo que podría acarrear problemas al abrirlas. Sus hojas quedarían colgando hacia abajo, y sería peligroso.

Su apertura, generalmente, se puede dar en dos tiempos. Y diferirá en función de si se abren de abajo arriba o de arriba abajo. En el primer caso, serán ventanas que se separen más hacia el techo y seguirán pegadas en su parte inferior.

Generalmente cuentan con dos posiciones de apertura, pero no dispondrán de mucho ángulo en ninguna de las dos. Por seguridad. Por eso, las que más se instalan en buhardillas y desvanes son las que se abren de abajo hacia arriba. En este caso, no suelen llegar hasta el suelo, lo que permite abrirlas hacia afuera 90 grados sin ningún problema.

Ventanas redondas: no sólo para las casas en la costa

En muchas casas de la costa, sobre todo en las plantas superiores o en la escalera interior del edificio, hay ventanas redondas. Estas se abren por mitades, o bien en horizontal o en vertical. Y sus marcos suelen ser de colores vivos. En las casas más antiguas son de madera, pintada en muchos casos. Pero en muchas ya empiezan también a instalarse con bordes metálicos, lo que mejora su aislamiento.

Esto ha hecho que este tipo de ventanas no se vean ya únicamente en este tipo de casas. Ni se limiten solo a las viviendas de zonas costeras. También se pueden encontrar ya en la ciudad, en las casas y viviendas de estilo moderno y actual. Dan a las casas un estilo diferente, y se pueden instalar tanto de tono metálico como en distintos tonos.

De suelo a techo: ventanas que se convierten en puertas correderas

En las casas con jardín o en las estancias que dan al balcón se suelen instalar ventanas de gran tamaño, que van desde el suelo hasta el techo. Generalmente tienen una hoja de cristal de gran tamaño, y también reforzada para evitar roturas. Sus marcos suelen ser metálicos. Además, generalmente son de apertura corredera, lo que hace que también funcionen como puertas correderas.

Gracias a esto, estas ventanas facilitan no sólo la entrada de luz en gran cantidad a las viviendas. También dan acceso tanto al balcón como a la zona que rodea la vivienda. Eso sí, dado que se utilizan en ambos casos para acceder al interior de la casa, hay que tener en cuenta que es necesario instalar en ellas mecanismos de seguridad para evitar que cualquiera pueda abrirlas y entrar en casa.

Estilos de ventanas que forman un mirador o un balcón

Si en una zona de la casa hay un saliente, especialmente en su planta baja, se puede instalar en ella una ventana que convierta a la zona en un mirador. De esta manera, la estancia contará con una zona realmente acogedora, y recibirá más luz. Sobre todo en invierno.

Hay otro tipo de ventanas que puede provocar un efecto similar, pero transformando el saliente en un balcón. Además, este saliente se puede crear mediante la construcción de un pequeño soporte en su parte inferior. Su misión será sujetar la estructura. Generalmente, tendrá bordes y marcos de aluminio, y cristales de arriba abajo. Eso sí, para que se puedan abrir suele haber alguna ventana de apertura convencional a media altura de la estructura.

Ventanas rectangulares: para espacios pequeños

En muchas casas rústicas, sobre todo en las de cierta antigüedad, hay estancias en las que las ventanas son de poca altura y más anchas de lo habitual. De esta manera, quedan con forma rectangular. Son comunes en ciertas cocinas, y también en cuartos de plancha y despensas y lavaderos. Generalmente están situadas sobre el lavabo o el fregadero, para que esa zona tenga más luz.

En cuanto a su apertura, puede ser bastante diversa. Las más frecuentes en estos estilos de ventanas son correderas, y en pocas ocasiones contarán con hojas que se abran al interior. También se pueden instalar ventanas de este tipo con un sistema de apertura de guillotina. En este caso, la ventana tendrá una única hoja, que se abrirá hacia arriba tirando de ella por su parte superior. Generalmente, la altura a la que se puede abrir estará limitada.

Estos estilos de ventanas de ventanas, también frecuentes en casas de aire rústico o en varias viviendas de la zona norte del país, también pueden tener dos hojas. Una de ellas, la situada en la parte superior, es fija. Mientras, la inferior se puede abrir hacia arriba deslizándola sobre la fija como si fueran ventanas correderas en horizontal.

Paredes acristaladas, para las viviendas de estilo moderno

En muchas viviendas con una arquitectura moderna y caracterizada por las líneas rectas y los espacios rectangulares, se opta por sustituir las paredes al exterior de los pisos superiores por ventanas acristaladas. En este caso, toda la ventana hace de pared. No hay duda de que este tipo de ventanales dan un aspecto espectacular a la casa. Pero para su instalación hay que contar con ciertas precauciones.

Entre ellas, que el cristal sea reforzado. La ventana también ha de estar bien aislada. Sobre todo en las viviendas que estén situadas en climas más fríos, o en las orientadas al norte.

Que toda la pared sea una ventana no implica que pueda abrirse en su totalidad. Es posible que integre otras a media altura, de tipo convencional, que puedan abrirse y cerrarse con normalidad. Podrán ser o bien correderas o de apertura hacia el interior. En la mayoría de casos serán de este último tipo.

Estas ventanas modernizan el aspecto de las fachadas, pero también restan intimidad a quienes viven en ellas. Para evitarlo se puede recurrir a varias soluciones. Por ejemplo, la colocación de cortinones opacos en su interior. También se puede optar por cubrirlas con contraventanas de varias hojas, y rejilla, que se puedan retirar casi por completo o cerrar por partes. Así queda solucionado el problema de la intimidad. Y también mejora la protección de estos estilos de ventanas frente a los elementos.

Una variante de este tipo de ventana es la ventana esquinera: se trata igualmente de ventanas que van des del suelo hasta el techo. Solo que en vez de cerrar una pared, dejan abierta una esquina de la casa por completo. Este tipo de ventanas también suele contar con otras integradas que puedan abrirse. Y son una solución que permite contar con más intimidad, puesto que no dejan a la vista toda la habitación a la que dan. Sólo una parte.

Ventanas con arco superior

En las viviendas de estilo colonial, e incluso en algunas de alto standing y un diseño más clásico, se pueden encontrar ventanas y puertas acristaladas que se caracterizan porque no todas sus líneas son rectas. En su parte superior, estas ventanas tienen forma circular. Como resultado, estas ventanas tienen un arco en su parte de arriba.

Generalmente, las ventanas de este tipo son metálicas. Y resulta también habitual que en lugar de contar con cristales de una sola hoja, estén formadas por cristales divididos por franjas metálicas formando una red de cuadrados o rectángulos. Los cristales, de menor tamaño, irán en el interior de estos cuadrados o rectángulos.

El efecto que se consigue con ventanas de este tipo es muy elegante. Sobre todo en casas de estilo colonial. Generalmente, sus marcos son metalizados y en color blanco, lo que también hay que tener en cuenta de cara a la decoración interior de la vivienda. Pero también para la pintura de las paredes (o su empapelado) y los colores del exterior de la vivienda.

Estas ventanas pueden ser de altura convencional, como hemos comentado. Pero también pueden sustituir a las puertas. En este caso, suelen ser puertas de una anchura no muy elevada, y de doble hoja. Generalmente, las hojas de este tipo de ventana que funciona como si fuese una puerta, se abren hacia el interior.

Ventanas metálicas convencionales: corredizas o con doble apertura

A pesar de que hay numerosos estilos de ventanas, las más comunes son las metálicas o de PVC. Tienen bordes de dicho material, y hojas de cristal. Se pueden abrir de muchas maneras. Por ejemplo, pueden ser correderas, o también abrirse hacia el interior. Pero también pueden tener un doble sistema de apertura.

Este tipo de ventanas se pueden, por un lado, abrir con un sistema abatible que las abre un poco desplazando la hoja desde su parte superior hacia adentro, en diagonal. Es una apertura que puede servir para ventilar de manera prolongada, ya que no es muy grande.

A su vez, estas ventanas también cuentan con un sistema de apertura hacia adentro convencional. Eso sí, no se puede pasar de un sistema a otro directamente, ya que hay que cerrar primero la ventana para poder cambiar entre ellos. Para seleccionar el tipo de apertura deseado hay que utilizar la maneta de apertura y cierre. Así, en función de la posición en que se coloque esta manera, la ventana se abrirá de una u otra manera.

En definitiva, hay decenas de estilos de ventanas. Aquí hemos hablado de algunos de ellos, los que con más frecuencia se suelen utilizar para cambiarlas en las reformas. No obstante, decidirse por unas u otras suele ser un poco complicado. Por lo tanto, lo mejor es contar con los consejos de expertos en reformas integrales en Madrid, como los de Reformadísimo. Ellos se encargarán de estudiar tanto el proyecto de reforma como el estilo de la vivienda. A continuación elegirán los estilos de ventanas que sean más acordes con él para que puedas elegir el que más te guste.

Contenido validado por María Luisa De La Rubia
Socia Fundadora en Reformadisimo